O Casal
Una finca con mucha historia
O Casal das Árbores nace del concepto gallego de casal, como agrupación de casas en el rural que forman una pequeña aldea. La vivienda restaurada es parte de una antigua curtiduría del siglo XIX. Está ubicada en un amplio jardín con grandes árboles y un original hórreo. Situado en el interior de una extensa finca dedicada a explotación forestal con especies de madera noble.
En la terraza exterior podréis disfrutar de agradables comidas rodeados de naturaleza. Al fondo las vacas y caballos de la finca. Y en el entorno más cercano hay un invernadero, donde podréis recoger alguna verdura fresca. También hay un gallinero, donde podréis acceder a buscar huevos frescos.
- Casa amplia para 12 personas
- Entorno privado
- Ubicación estratégica.
- Invernadero propio
- En un refugio de fauna
- Lindando con el camino de Santiago
- Finca en explotación forestal ecológica
-
Vivienda
Acogedora, amplia, cómoda, elegante, luminosa, tranquila, 6 habitaciones. Grandes espacios comunes, escogida biblioteca, cuadros originales, piano de cola, chimenea.
-
Jardín
Qué reposo, qué luz, qué garruleiro, brando cantar dos váreos paxariños
Rosalía de Castro -
Finca
Delante de nuestra puerta tenemos un rincón de bosque en el que todavía pueden vivirse aventuras y descubrirse secretos.
Tarifas
La casa se alquila al completo y tiene una tarifa de 425 EUR por noche.
En fechas especiales como Navidades, Semana Santa y verano las tarifas pueden variar; contacta con nosotros para consultar tarifas llamando al 682 769 217 o mediante nuestro correo electrónico neiro@ocasaldasarbores.com.
– Cobertura WiFi
– Leña para chimenea
– Ropa de cama y ducha
10% IVA incluido
Historia
Desde 1970
Se trata de un lugar pertenecía al Convento de Santa Clara a comienzos del siglo XVIII, y que la aforó en 1720 a don P.S F y a sus descendientes por un período de “tres reyes”, hasta el siglo XIX. En el siglo XIX funcionó un tiempo como fábrica de curtidos de pieles hasta que fue embargada y puesta en venta en el año 1835. Durante el siglo XX la finca se dedicó en gran parte a explotación forestal, utilizando para ello el eucalipto, tan extendido en Galicia por su rentabilidad, pero que presenta grandes inconvenientes por ser invasivo, por desecar el terreno y por su alto riesgo de incendio. En 1975 fue adquirida por una pareja de arquitectos que fue desarrollando su proyecto de vida en torno a ella. Inicialmente crearon una explotación de ganado vacuno para la producción de leche que posteriormente abandonaron para pasar a transformar la vivienda principal en una vivienda cómoda y amplia a la que se fueron a vivir en el año 1998. A partir de entonces el proyecto volvió a la explotación forestal pero tratando de buscar especies de madera más noble que pudieran tener más valor añadido a pesar de ser de crecimiento más lento. A lo largo de este último medio siglo que ha transcurrido probablemente la mejora más significativa del entorno fue un progresivo pero profundo proceso de transformación de la finca consistente en reemplazar el gran eucaliptal que existía al principio por el original bosque atlántico con el que nos encontramos hoy.
